“El robo del siglo” es un filme dónde se aclara que los hechos son reales y que los personajes tienen sus nombres reales. El copamiento y asalto a un banco en la ciudad de Buenos Aires conmovió a la población de ambas márgenes del Plata. Este filme recrea la situación, desde que el grupo de delincuentes planea el robo, hasta su desenlace con la toma de rehenes, y un final… que deja mucho para pensar.

Esta producción argentina llega para iniciar el año 2020, ha sido ya bastante comentada en Argentina, sobre si se está haciendo una apología del delito, porque se dan todos los detalles, la mayor parte del dinero nunca fue encontrada, pero además al día de hoy todos los involucrados están en libertad.

La dirección del filme es de Ariel Winograd, con guión de Alex Zito y Fernando Araujo, la música que resulta exquisita en algunos momentos, con muy buena selección de temas, que se vuelve en un protagonista de la historia, es de Darío Eskenazi, la fotografía de Félix Monti.

El filme cuenta con las actuaciones de Guillermo Francella,  Diego Peretti, Luis Luque, Pablo Rago, Rafael Ferro, Mariano Argento, Juan Alari, Iván Steinhardt.

Las actuaciones de Guillermo Francella y de Diego Peretti son impecables, cada uno metido en su personaje dan todo de sí, para que sean totalmente creíbles sus situaciones y lo logran.

Todo comienza con una lluvia intensa sobre la ciudad de Buenos Aires, en la calle no hay un alma. Araujo está refugiado bajo el alero de un local cerrado. Sobre la avenida se han formado varios charcos; en ese fragmentado espejo de agua se distingue, deformado, un cartel luminoso. Araujo levanta la vista y descubre, delante suyo, la fachada del Banco Río.

El viernes 13 de enero de 2006, los francotiradores del Grupo Halcón están a la espera de una orden. Más de tres centenares de policías diseminados por el lugar aguardan la voz de su jefe. Miguel Sileo, el negociador, deja diluir las esperanzas de que Vitette, uno de los líderes de la banda de ladrones que entró a la sucursal del Banco Río de Acassuso de señales de vida.

Las pizzas que había pedido como condición se habían enfriado. El grupo Halcón recibe la orden y entra: se encuentran con lo inesperado. Armas de juguete y una veintena de rehenes asustados los esperan dentro; no hay señales del grupo de ladrones.

Este filme fue rodado en Argentina en 2019 y su estreno fue el 16 de enero de 2020, dirigida por Ariel Winograd, se encuadra dentro del género thriller policial y comedia​.

Una banda de asaltantes, de seis ladrones armados con armas de juguete, irrumpe en el Banco Río y toman como rehenes a 23 personas. Se llevaron cerca de 15 millones de dólares, de 147 cajas de seguridad.

Diego Peretti es Fernando Araujo, cerebro y ejecutor del golpe. Guillermo Francella es Mario Vitette «El uruguayo», ​

Pablo Rago es «El marciano»5, Luis Luque se mete en la piel de Miguel Sileo, el negociador de la policía, miembro del grupo Halcón. Juan Alari, es el «Gaita», conductor de la camioneta que se lleva a los ladrones, Rafael Ferro es Alberto de la Torre «Beto», encargado de la toma de rehenes. ​

Magela Zanotta es la Turca, la esposa de De la Torre y Johanna Francella es Lucía, Mariano Argento es «El Doc» Debauza, Pochi Ducasse, como la señora del banco, Mario Moscoso, como el cura y Enrique Dumont, como el psicoanalista.

El rodaje de la película comenzó el 15 de abril de 2019, en Buenos Aires​ y terminó el 4 de junio del mismo año en Potrerillos (Mendoza)​, unos aproximados siete meses y medio antes de su definitivo estreno.

​El guión fue escrito por el productor Alex Zito y el propio autor del atraco, Fernando Araujo, que tenía un taller de arte plástico a diez cuadras del banco.

La película recibió críticas muy favorables por parte de la prensa especializada.

La película, distribuída por Warner Bros, fue estrenada en 376 salas en Argentina.

“El robo del siglo” rápidamente se convirtió en la segunda película argentina más vista en la historia en su día de estreno, sólo por detrás de lo conseguido por la cinta animada “Metegol”.

Vale la pena verla, dejando de lado que puede ser una apología del delito y tomándola como una comedia, ya que hay muchos momentos para divertir al público, sabiamente combinados con momentos de tensión, y sin sorpresas sobre el final, ya que el suceso fue ampliamente difundido en el momento de los hechos.

Al final, también se hace un repaso sobre la vida actual de los seis ladrones, así como de los policías que actuaron en el hecho. Una historia que camina en el filo entre lo políticamente correcto y una apología del delito.