La Asociación Internacional de Teatro para la Infancia y la Juventud (Assitej) celebra en el Día Internacional del Teatro para niños y jóvenes, el 20 de marzo. En el marco de este festejo Assitej-Uruguay realiza un festival con cinco obras para chicos en el Teatro Solís, el martes 20 y miércoles 21.

En 120 países este mes Assitej está celebrando con distintas propuestas el día Día Mundial del Teatro para Niños y Jóvenes, en Uruguay fueron seleccionadas por un jurado especializado cinco obras para conformar un Festival que ya se encuentra en su cuarta edición. Cerca de 4000 niños y jóvenes pasaron por cada una de las tres ediciones anteriores, colmando las instalaciones del Teatro Solís.

Este año nuevamente se espera que numerosas escuelas y colegios participen de este Festival, el público en general también podrá hacerlo, con un precio muy popular $90 para cada una de las funciones.

El martes 20 de marzo se ofrecerá las 13 horas, “Guille” (de 6 a 10 años) y a las 15 horas “Verónica Princesa” (de 8 a 12 años).

El miércoles 21 de marzo será tiempo para las 10:30 horas ver “Había una vez… María Elena” (de 3 a 5 años); a las 13 horas. “Clown Don Quijote de la Mancha” (de 7 a 12 años) y a las 15 horas, “La Increíble Aradia nunca tuvo botas” (de 8 a 12 años)

Localidades están en venta en la boletería del Teatro Solís y en Ticketantel, para público en general.

Las instituciones públicas y privadas deberán reservar sus localidades llamando a Producción de Assitej-Uruguay

Assitej se compromete en sus principios y en su práctica a la colaboración y cooperación con otras asociaciones artísticas internacionales, con el fin de abogar por el teatro

y las artes como expresiones universales de la humanidad, fundamentales al desarrollo humano, social y cultural, y como formas de creación de puentes para el entendimiento

y la tolerancia tal como está consagrado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

R E S E Ñ A S DE LAS OBRAS

“GUILLE”. Un espectáculo teatral que integra a títeres gigantes y canciones originales y busca sensibilizar en la importancia de concebir el derecho a ser cuidado como un derecho humano. Compartiremos las emociones de una noche en la vida de Guille, un niño que espera con entusiasmo la llegada de su hermana recién nacida. En esta noche decisiva, Guille será visitado por diferentes personajes imaginarios, que representan sus afectos, sus miedos, los mandatos sociales. El público, otro de los amigos imaginarios de Guille, vivirá junto a él estas emociones y podrá participar a lo largo de la obra.

“HABÍA UNA VEZ… MARÍA ELENA”, es una obra creada con canciones y cuentos de María Elena Walsh. Tres seres misteriosos, las Ploplas, llegan a esta tierra desde el recuerdo olvidado. Su objetivo: cosechar una flor. Para lograrlo no necesitan más que su imaginación y la voluntad de llevar a cabo cada decisión. Guiadas por los personajes de María Elena nos invitan a una vivencia compartida entre grandes y chicos.

“CLOWN DON QUIJOTE DE LA MANCHA”. Seis payasos se juntan para interpretar uno de los grandes éxitos de la literatura española; Don Quijote de la Mancha. En el camino se encuentran con varios desafíos y aprenden como montar una obra de teatro, descubriendo el gran mundo mágico de la imaginación sin límites.

“LA INCREÍBLE ARADIA NUNCA TUVO BOTAS”. Un tirano tiene aterrorizado al reino. El joven Caramba, ladronzuelo hambriento, escapa de sus garras la noche que conoce a Aradia. Ella es un felino misterioso, que dice ser enviada por la diosa Diana, protectora de la Naturaleza. Trae un mensaje mágico para los campesinos que, junto al coraje de Caramba, los ayudará a terminar con el tirano y encontrar la felicidad.

“VERÓNICA PRINCESA”. Verónica acaba de discutir con su madre y se siente incomprendida. Aparecen entonces una zapatera mágica (su hada madrina) y el Hombre Orquesta (músico) y le muestran a Verónica los zapatos de todas las princesas de los cuentos al ponerse esos zapatos revive los cuentos. A través de diferentes situaciones y divertidos encuentros, Verónica comprende que no hay nada perfecto, que las princesas son mujeres con sus propios problemas y que no hay heroína más grande que su propia madre.